Mario Bava fue un director de cine actualmente reconocido como el padre del género giallo y un creador de películas de terror que combinan con elevada maestría una estética marcada por elementos góticos, románticos y oníricos muy complejos y, sinceramente, irrepetibles. Muy pocas personas conocen a este maestro del terror, por ello ofrecemos esta revisión de su filmografía.
Bava nació en San Remo en el año 1914 y vivió hasta 1980, estudió Bellas Artes, pero al no poder desarrollarse como pintor, decidió seguir los pasos de su padre, quien era un director de fotografía y escultor. Comenzó dedicándose a la fotografía cinematográfica, camarógrafo y creador de efectos especiales.
Su trayectoria profesional dio importantes frutos en el cine del terror y fantástico, dentro del subgénero giallo que él mismo creó, Bava dirigió sus mejores películas entre los años 60 y 80. Trabajó hasta su muerte, la cual aconteció a causa de un paro cardíaco.
Primera etapa en el cine
En 1930, Mario Bava era operario de cámara trabajando en proyectos de Roberto Rosselini. Luego, recibe la oportunidad de ejercer como director de fotografía, lo cual hará por los próximos 20 años. Participó en la primera película de terror italiana en el departamento de efectos especiales.
Sus siguientes trabajos fueron en películas de corte épico, dentro del género Plénum. Hizo de codirector en películas de corte fantástico y de terror, aunque no recibió los créditos por falta de experiencia.
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Dirección en solitario
Esta etapa empieza en los años 60 con la película La maschera del demonio. Bava se diferenció por su propuesta de iluminación y sombras. Toda la cinta se caracteriza por una atmósfera onírica, de suspenso y tensión. A este título le siguieron Hércules en el centro de la tierra y La furia de los vikingos, ambas de 1961.
Vino un periodo de descanso durante el cual, Mario Bava, consideró retirarse de la dirección. Por fortuna, dos productores norteamericanos, Jim Nicholson y Samuel Arkoff, llegaron para impedirlo. En 1963 se estrena La muchacha que sabía demasiado, con la que el director experimentaría con los primeros rasgos del género giallo.
El primer film giallo se llamó Seis mujeres para el asesino, de 1964. En esta película se ven los rasgos distintivos como el empleo de una trama de misterio y homicidio, la presentación del asesino a color, las víctimas son todas bellas y jóvenes y una violencia manifiesta. Hay un placer claro en la preparación de los crímenes y en la ejecución de los asesinatos. El psicópata está enmascarado hasta su revelación al final de la trama.
A partir de ese momento, Bava, se entregó al cine fantástico y de terror con las obras: Terror en el espacio, 1965; Operación miedo, 1966; Danger: Diabolik, 1968; Cinco muñecas para la luna de agosto, 1970; Four Times That Night, 1971 y Roy Colt y Winchester Jack, 1970. Otras películas destacadas fueron Bahía de sangre, 1971, su film más violento.
También, Orgía de sangre, 1972 El diablo se lleva los muertos, 1973 y Semáforo rojo, 1974. Las tres alcanzaron un gran éxito. Su última película fue una codirección de la trilogía Las tres madres de Darío Argento, 1980. Lo que logró Bava ha servido de inspiración a muchas películas de terror que puedes ver por streaming en Umbra. Regístrate y comienza con tu periodo de prueba gratis.
